Por: Dr. Luis O. Rodríguez
Esta nota tiene la intención de ayudar al lector a conectar el uso de las tan populares redes sociales con la misión de Dios. Puesto que vivimos en una sociedad que se encuentra sumergida en una realidad cibernética y virtual, el uso de las redes sociales se convierte en parte del quehacer cotidiano para muchas personas.
Debido a este innegable estado, es imperante siempre revisar guías y mesuras que establezcan parámetros que nos ayuden a echar mano de ellas y utilizarlas para avanzar el reino de Dios. Recordemos las palabras sapiensales en Proverbios 9:10, “todo lo que te viniere a la mano para hacer, hazlo según tus fuerzas…” Aunque estas redes van dirigidas a la interacción social y humana, no hay duda que representan un medio para transmitir el mensaje de fe y esperanza de la iglesia de Dios.
A continuación, algunas ideas y consejos para maximizar el potencial de este medio de comunicación social para la obra de Dios:
1. Recuerde el antiguo dicho: “lo poco agrada y lo mucho enfada”. No sobre abuse el uso de las mismas porque correrá el riesgo de ser predecible y enfadoso.
2. Determine de antemano cómo su mensaje puede ser interpretado o leído por los que le siguen y los que solamente entran a su página para investigar sus hazañas.
3. Si va a poner un comentario, recuerde ir al grano y ser selectivo a la hora de expresar una idea o un mensaje bíblico.
4. No entre en controversias de fe o doctrina en las redes; no es el foro adecuado para estos asuntos. Usemos la discreción y el sano juicio.
5. Promueva ministerios eficaces y relevantes a través de las redes y no focalice su atención en un individuo. El uso de las redes sociales como herramienta de la misión de Dios no es un foro de auto exaltación o promoción personal. En las redes, Cristo debe también ser exaltado.